viernes, 25 de enero de 2008

Buscar trabajo: Pasatiempos Mortal

Si sois lectores habituales de BloGui-J, sabréis que uno de los principales ingredientes necesarios para que a un servidor se le de por publicar algo, es que esté inspirado... Siempre estoy con el mismo cuento de "es que me falta inspiración", y otras excusas del estilo... El otro ingrediente es que tenga ganas, pero sin el primero, las ganas sirven de poco.

Y como habréis observado últimamente (desde verano del año pasado, más o menos...), mi periodicidad no es mi principal virtud. Suelo tener parones constantemente, lo cual para un blog significa pérdida de credibilidad, pues un blog no es más que un medio de comunicación, y si ese medio repite lo mismo constantemente, le termina pasando como a Localia, que no lo mira ni su madre (salvo cuando ponen PlayBoy TV, que no es el caso).

Allá por Agosto, se podía entender que los exámenes de Septiembre estaban ahí. Había que concentrarse... Aunque todos sabemos (y los que tenemos blog más todavía), que cuando toca estudiar, lo que no falta es imaginación... Personalmente, era hincar los codos y teletransportarme al momento a parajes tan curiosos como "las nubes", "la parra", o el maravilloso país de Babia... Pero no, en Babia no había nada interesante como para publicar en BloGui-J...

Además, como muchos estaréis al tanto, aquellos eran mis últimos exámenes... Vale, al final me quedó una para Diciembre, pero como dicen los del fútbol, estaba "virtualmente" licenciado. Así que después de los exámenes tendría tiempo de sobra para publicar entradas hasta la saciedad... Y sí, el tiempo me sobraba, efectivamente. Pero había algo que había desaparecido de repente...

Y es que, amigos míos, cuando uno deja de trabajar, de obligarse a hacer algo, el tiempo es un concepto mucho más denso... De pronto, no tenía nada que hacer. Vacaciones permanentes. "Que de puta madre", pensaréis muchos. Pero es entonces cuando yo digo, "qué equivocados estáis". Ya que, en cuanto dejé de tener obligaciones, mi horizonte temporal se fue a tomar por saco. No hay un cambio de ritmo en el calendario, no se hasta cuándo estaré así (sin hacer nada). Fue como si se me quitasen las ganas de hacer cualquier cosa. Concentrarse en hacer algo se ha vuelto muy complicado porque "bueno, tengo tiempo para hacerlo"...

Bueno, en realidad, como muchos sabréis, no estoy completamente ocioso, ya que desde antes de licenciarme estoy buscando trabajo... Y la cosa es mucho más complicada de lo que me podía imaginar. Recuerdo como antes escuchaba hablar del tema de buscar trabajo, y la gente me decía "es una de las etapas más difíciles de la vida". Y yo pensando, "pero a ver, ya no tienes que estudiar, sin exámenes, sólo esperar a que te llamen para trabajar... ¡Y encima te pagan! ¿Cómo va a ser eso tan duro?". Pues lo es. Buscar trabajo es una absoluta mierda.

Antes de nada, adelantar que estoy haciendo una lista de las empresas a las que me estoy presentando para trabajar y me han llamado para una entrevista. El día en el que por fin esté trabajando (que espero que llegue, y pronto), haré un breve repaso sobre si dichas empresas (las que me han "rechazado") han sido correctas en sus procedimientos, si han sido chapuceras, o si directamente fueron para cagarse en ellas... Las empresas que me han entrevistado hasta ahora han sido, por lo general, rápidas a la hora de llamar tras echar el currículum, medianamente eficaces a la hora de concertar la entrevista, y radicalmente lentas e ineficaces cuando necesitan decidir qué hacer con los individuos y contactar con los mismos... Como digo, cuando todo esto termine, tocará poner a cada uno en su sitio con un profundo y totalmente subjetivo análisis de todo esto (que para eso tengo un blog).

Pero volvamos a los de que buscar trabajo es una mierda. A continuación os expondré los puntos por los que yo he pasado, para que entendáis mi punto de vista:

1. Al terminar los estudios (en mi caso, cuando la peña estaba en pleno primer cuatrimestre), empiezas tanteando, sin forzar demasiado, eligiendo bien las empresas a las que te presentas.

2. Al cabo de dos o tres semanas de búsqueda sin demasiado éxito, te das cuenta de que el proceso va a ser más largo de lo que te pensabas. En mi caso, después de ese tiempo llegaban las vacaciones de Navidad... Esto por una parte estaba bien, ya que entonces no sería el único ocioso. Por otro lado, yo llevaba mis tres semanas de vacaciones, y estaba hasta la polla de estar ocioso. Era el momento de ponerse nervioso.

3. Pasan las Navidades (en las que apenas se puede buscar nada, pues las empresas, por mucho que digan, no la rascan) y ya la cosa se pone fea. Un mes sin encontrar trabajo, cansa... Trataré de explicarlo mejor con una metáfora. Es como si estas esperando a ver si pasa una estrella fugaz, y te pasas la puta noche sin ver nada (y sin hacer otra cosa, pues NECESITAS ver esa jodida estrella)... Y bueno, eso sin mencionar que vivo con mis padres, lo cual no ayuda lo más mínimo en lo que a inspiración se refiere. Si al principio seleccionaba cuidadosamente dónde echar currículums, ahora ya no me importa ni a qué se dedica, ni cuánto me pagan, ni dónde está, ni si el negocio es legal... En fin, echo donde haya.

4. Pero lo peor está por llegar. Y es que, poco después de Navidad, llegan los exámenes del primer cuatrimestre... Alguno pensará "pero mamonazo, que tu ya no tienes de eso, aprovecha"... Sí. ¿Que aproveche para qué? ¿Para cascármela a dos manos? Resulta que todos mis amigos, o bien estudian, o trabajan (fuera de mi ciudad). Y esto significa que, si bien antes me aburría mucho pero al menos salía los fines de semana, ahora sólo me aburro mucho. Es como si estuviese de exámenes pero sin tenerlos.

Entonces alguno me dirá "¿preferías tener exámenes?". Pues no, claro que no. Sólo digo que me abuuuuuuuuurrooooo... Y por eso os he escrito toda esta parrafada que no llega a ninguna parte, pero que espero que, además de haberos quitado tiempo de estudio/trabajo, os haya transmitido mis sentimientos en estos momentos. Mientras tanto, sigo buscando...

miércoles, 16 de enero de 2008

Grandes Programas en el Olvido: La noche de los castillos

Hace ya unos meses, os aburría con un extenso repaso sobre los entresijos del Gran Juego de la Oca, para recordar muchos detalles olvidados en el fondo de nuestra memoria de este gran programa. Hoy (y aprovechando el tirón "Murroni"), vuelve la sección con un concurso que pocos recordaréis por su simple título, pero que seguro que a medida que leáis iréis diciendo "¡Ahhhh...!", porque fue casi tan mítico y espectacular como el Juego de la Oca. De hecho, este programa fue creado por Jocelyn Hattab, el mismo que creó el Juego de la Oca...

La Noche de los Castillos fue un concurso-espectáculo, producido por Televisión Española durante 1995 y 1996, y emitido por la Primera, primera cadena del mundo en emitirlo... Por aquel entonces fue el programa más caro que jamás se había hecho en España, y de hecho, fue uno de los motivos por los que TVE entró en pérdidas. Tuvo una altísima audiencia en su primera temporada aunque, sin razón aparente, durante la segunda temporada fue cayendo en picado.
Cada programa transcurría en un castillo diferente de la geografía española, aunque las malas lenguas dicen que las últimas pruebas se acabaron rodando en el castillo de Alcorcón por falta de presupuesto...

A continuación os dejo un vídeo de la primera emisión del concurso, en el que el presentador, Luis Fernando Alvés, explica con detalle los pasos que tienen que dar los concursantes para ganar el concurso...


Lo cierto es que estaba bastante currado...

Bases
Concursaban tres equipos (rojo, verde y amarillo) formados por tres personas cada uno. El programa estaba dividido en tres etapas: La de los coches, la del castillo y la de la torre. Sólo un equipo podía llegar a la segunda y tercera fase, donde tendrían que salvar a una princesa para poder llevarse el premio final.

En la etapa de los coches, los tres equipos tenían que ir desde la salida al castillo, cada uno en un todoterreno, por unos caminos que tenían una serie de bifuraciones. En cada bifurcación, uno de las alternativas llevaba directamente a la siguiente bifurcación, mientras que la otra llevaba al equipo correspondiente a una prueba que tenían que superar para continuar en el juego. El primer equipo en llegar a las puertas del castillo era el que pasaba a la siguiente fase del concurso.

Dicho equipo, tenía el privilegio de entrar a concursar dentro de la fortaleza, adecuadamente preparada. Así que se adentraban en el castillo de la mano de una presentadora-guía del programa (Marta de Pablo, Gabriela Ventura o Sol Abad, eran las guías de cada uno de los equipos) así como de Luis Fernando Alvés. En el interior del castillo (segunda etapa), un elenco de actores y decorados se encargaban de dotar con el máximo realismo las escenas. El objetivo de los jugadores era recuardar la máxima cantidad de oro posible; al final del programa, se fundía ese oro para hacer una llave, que tenía que ser lo suficientemente grande como para abrir la prisión de la princesa capturada por Torque, malo maloso interpretado por José Carlos Rivas. Para saber dónde se encontraba la princesa, tenían que seguir las indicaciones del Rey Folop (interpretado por Anthony Quinn; sí, sí, el americano).


¡¡Mete la puta llave, joder!!

A su vez, durante las pruebas que debían superar en el interior del castillo, los concursantes debían estar atentos de no cruzarse con Torque, el cual podía dejar fuera del juego a cualquiera de los concursantes, con solo alcanzarlos. En caso de que llegasen a tiempo de rescatar a la princesa, tenían que salir con ésta fuera del castillo, a una torre allí instalada en la cual tenían que superar una serie de pruebas ascendiendo por diferentes niveles.

Los concursantes que no consiguieron superar la primera parte del concurso, podían, en esta etapa, arrebatar a la princesa de las manos de los concursantes clasificados, para hacerse de esta manera con el premio, que ascendía a 2 millones de maravedíes (4 millones de pesetas).

Una vez superadas todas las pruebas de la torre, la princesa se reuniría con su padre, y los jugadores ganarían los 4 milloncejos.

Como se ha dicho antes, el programa tuvo buenos resultados de audiencia, pero muy pronto fue trasladado a horarios fuera del "prime-time" y cayó en picado hasta que se terminó de emitir... Sin embargo, hay quien dice que Torque sigue acojonando al personal...


Niñato de Valencia, huye, que ahí te va ¡¡TORQUE!!